11.1.07

4: Desde siempre hubo palabras que iban y venían

Durante ese primer período de separación, es justo decir que el sentimiento de enamoramiento entre Daniel y yo era recíproco y alimentado de muy diversas maneras. Cartas fueron y vinieron muchas veces en un tiempo en que no había ni correo electrónico ni teléfonos celulares. Yo estaba lejos de La Habana y él solo pudo ir a visitarme una vez porque tenía que estudiar bastante también y estábamos lejos. El mapa de Cuba es ancho y largo. Fue como un mes y piquito que estuvimos separados. Tampoco teníamos fácil acceso al teléfono. Es difícil desde aquí recordar cómo era la vida en Cuba en aquellos tiempos. En todo caso, durante el período llamado "especial" de los noventa, fue más dura. Eso sí que no lo viví,

Hace poco tiempo de manera curiosa me encontré con un montón de cartas de Daniel de aquellos días. Yo creía que se me habían perdido pero la fortuna me las trajo de vuelta por alguna misteriosa razón.

En una de sus primeras cartas, Daniel me decía, entre otras cosas: "te escribo porque voy a verte y posiblemente me veré muy limitado para decirte cosas, para besarte, para hacerte ver y sentir que me sos necesaria, de vital importancia.

No sé, no he podido encontrar palabras para definirte, y en estas letras no podré tampoco decirte lo que quiero, espero que me vayás enseñando a hacerlo. En estos días con tu ausencia me he dado cuenta de cuánto me has marcado; incluso, te confieso que tuve miedo al pensar en la posibilidad de perderte, pero creo que mi amor no deber ser egoísta, pensando en estar bien yo siempre; quiero estar con vos hasta que digás. Todo el tiempo que te sea necesario. ¿ cuánto más? no lo sé…habrá oportunidad de estar siempre juntos? no lo sé."

Nunca me mintió Daniel con respecto al regreso: "A veces trato de encuadrar nuestra relación allá; y te confieso que se me hace difícil. Si continuamos tendremos que resistir a diferentes actitudes por parte de los que nos rodean. Imagino que la mayoría no lo aprobará. Tendremos fortaleza suficiente para eso?

Por otro lado, mis decisiones deben ser maduras; soy una persona que tiene que asumir responsabilidades por decisiones tomadas anteriormente, talvez fui inmaduro cuando las tomé, pero ahora debo ser lo suficientemente maduro para asumirlas.

Tal vez me esté haciendo demasiado enredo innecesario en la cabeza, pero es que lo que siento por vos ahora no es algo para “una aventura”. Tal vez con vos no sea así, tal vez tu interés sea pasajero ¿ por qué no? lo cierto es que me hacés tremenda falta ¿ qué vendrá después? Mi vida es una eterna conjetura.

La verdad, no quiero escribirte, quiero vivir con vos. Deseo frustrado? el tiempo y la situación venidera, ahora flotante, lo dirán. Me atrevo a navegar en este mar , si vivo o muero, de todas formas ganaré. El solo hecho de conocerte y saber que me querés es suficiente."

Yo como respuesta posiblemente le escribí muchas cartas, pero las mías, como no eran para mi no las tengo guardadas y él posiblemente sí las perdió o las dejó por allá. No eran tiempos tampoco para guardar las cosas en diskettes, discos compatos o llaves maya. Solamente sobrevivieron en cuadernillos viejos algunos poemas que intentaban expresar la calentura, la efervescencia, la tierna pasión que nos cobijaba.



Todo lo que escribo te incluye

porque simplemente no puedo esquivarte,

esconderme a tu voz y tus abrazos,

ocultar ni por un segundo los días de compañía,

las tardes enteras de amor irrepetido,

los pedacitos de historia que guardamos entre la piel y el alma,

las raíces que trato de sembrar en tu parcela,

la enorme caricia que vos: macho y compañero,

me has entregado tantas veces,

llenando de ternura mis cadera,

haciéndome volver a ser principio, mujer y hembra



Daniel, todavía en La Habana me decía: "He tenido que pasar varias veces por lugares donde hemos andado juntos. De verdad que cuando (...) uno de los dos se va, el que queda, queda…

El domingo ( hoy es lunes) fui con Javier a La Habana, buscábamos un lugar para comer y tomar. Ibamos a entrar a Los Andes ¿ te acordás? pero preferí no. Le dije por qué y se rió."

El Bar los Andes, a un costado de la popular calle conocida como La Rampa, cerca del Hotel Nacional, estaba en una esquina, en un alto. Allí habíamos ido la primera vez que salimos juntos a caminar por las calles de aquella ciudad que fue nuestra. En ese lugar pedimos una botella de vino blanco búlgaro de la que todavía guardo la etiqueta con un mensaje de él borroso por la parte de atrás. Se trata de un fósil de 1982. El vino blanco, sobre todo si es frutoso, deja un sabor peculiar en la boca y desde aquella vez, siempre que lo tomo se me viene a la cabeza aquella tarde, las manos ansiosas, las miradas entrelazadas, una mesa pequeñita, él frente a mi y yo frente a él como tantas veces, de nuevo las ganas de llorar...¿será por eso que luego me cambié al tinto?


"Nuestra relación ha nacido en condiciones un poco adversas, y se ha desarrollado ( y seguirá), en las mismas condiciones. De estos 2 meses, hemos estado juntos 4 días ( y medio); más o menos, y yo siento que no se ha debilitado, más bien la siento fuerte; las cosas que nacen en un medio estéril, acéptico, nacen débiles, enfermizas, y al poco rato mueren; las cosas que nacen en medios “adversos” (...) luchan desesperadamente por sobrevivir, y eso las hace fuertes, y se desarrollan con un vigor y energía que todo lo pueden lograr.

Nuestra relación es un poco eso, las condiciones nos han limitado, en alguna medida, pero veo ( y siento) que la necesidad de amarnos es cada día más fuerte. Te amo"

Yo embelesada, sólo oía la música y con ella seguía intentando hacer canciones:


Compré una cinta dorada para hacerme una trenza

quise enlazar mis dedos a tu pelo,

mis ojos a tus sueños,

mi corazón a la esperanza


Por entre sus letras se me anunciaban cosas y señales que no quise o no pude ver en medio del aquel enamoramiento inédito. ¿ Quién piensa en conflictos cuando todo lo ve rosado?

"De nuevo siento la inconstancia en mi, y eso me preocupa, a veces aflojo y no se puede aflojar. Quiero hacerte ver mis debilidades, porque he quedado con la impresión de que ves en mi un compañero con una gran firmeza…con un compromiso contínuo, ascendente, y no es así , temo que te desilusione de mi cuando te des cuenta que no soy todo lo que vos creés que soy. Es mejor así y no que venga el golpe después."

Mientras tanto, desde Brasil, los "tropicalistas" y desde Cuba la entonces Nueva Trova, integraban la banda sonora del idilio.


“Hoy mi deber era,

cantarle a la patria,
alzar la bandera,

sumarme a la plaza…

pero tu me faltas

hace tantos días

que quiero y no puedo sumar alegrías”

Silvio Rodríguez


"El regreso para mi significa enfrentamiento, prueba, lucha, lo ansío y le tengo temor. En vos necesitaré, y creo encontrar, apoyo, estímulo, ayuda, consejos, fuerza, en fin: compañía."

"A veces me siento terriblemente cansado como con un dolor inmenso en el alma, en la vida, y recuerdo dos cosas: (…) no tienes derecho a cansarte, y recuerdo de vos “duerma un poco, repose…” ¿ te acordás? aquella vez por teléfono que me hiciste sentirme tan bien…y así lo hago, y me levanto con confianza en mi, y con fuerza."


Hay horas en que es vital

que un barco

un velero,

una canoa,

una hoja seca acaso

navegue por tu río…




"Me gustaría llorar, o saber llorar como vos, pero me reprimo, me ahogo, me encierro y sueño…tenés tantas cosas lindas!

Me parece que te conozco de hace una eternidad, que nuestra relación tiene más años que los nuestros juntos, que sin haber estado físicamente juntos, hace mucho existe lo nuestro. No sé, parece que somos desde hace mucho; ¿ será por la intensidad que ha tenido nuestra historia? ¿ será por lo inevitable del comienzo de nuestra historia? Me lleno la cabeza de preguntas y de sueños, esperanzas, ansiedades.

Tengo temor, porque mi yo de ahora se va a enfrentar con (…) ¿ quién soy? ¿ a quién conocés? Por eso cuando leo tu carta( ...) me pregunto si es así, o es que soy un magnífico impostor.

Necesito fuerza, siento que vos me la das, y sé que estar con vos es vital para mi, Como quisiera vivir junto a vos eternamente! qué días más largos estos! (…) Qué decirte? que te quiero? que te amo? que te necesito? que vos me das la fuerza, la confianza, la alegría de poder vivir para luchar? No. Eso es poco…

Mi actividad y la tuya, ( allá o aquí) serán diferentes, y los lugares donde estaremos también, pero estaremos juntos, sí, siempre y cada ratito, cada vez que pasemos físicamente juntos, lo viviremos y aprovecharemos intensamente."

¿ Cómo no entendí? ¿ Cómo iba a hacerlo si solo tenía yo diecinueve años? ¿ Por qué me parece tan claro ahora lo que entonces no pude ver?


Te empecé a sentir claro,

bello, poderoso,

cercano y compañero

y te fui regalando las hojas

que de mi árbol se iban cayendo aún frescas;

me empezaste a construir de nuevo

sobre mi estructura desordenada

y un poco gastada en desvaríos,

locuras

y aventuras,

pero aún joven, débil y ligera.

Nos conocimos las pupilas,

el tacto, los sueños,

y empezamos a darnos centímetros de piel y de sonrisas.

Cuando todo esto se inició

fue como si de golpe,

vos con tu fuerza,

me impulsaras toda la mujer que tengo dentro

a salir de los peros y temores…

a correr plenamente,

satisfecha y extasiada hacia el alba…

siempre más alto, amor, más alto.

Nuestra historia se empezó a escribir

sin las promesas y palabras acostumbradas.

Fue cosa de gestos,

de pasos, de razones,

y un ojalá inédito y extraño rodeándolo todo.

Ahora me cuesta sabernos separados,

colgados,

reflexivos, absortos,

a la espera que es ya esperanza,

guindando de recuerdos

por hilos delgados, invisibles,

húmedos todavía


Un año y medio tenía Daniel de estar en Cuba. Después de ese largo período con poquísimo contacto con nuestro país, iba a volver. Con la partida , el compromiso:

"Haré todo por verte lo más pronto posible. Lo necesito. Por el momento un beso inmensísimo, eterno..."


Cierro los ojos

para que recorras

los senderos que invento

para que te canten las manos


Para Costa Rica me vine yo primero, sola, y me dispuse a esperar con ese beso humedeciéndome los labios.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

"Hay horas en que es vital

que un barco

un velero,

una canoa,

una hoja seca acaso

navegue por tu río…"

Que bonitoooooooooooooooo!
QUE BONITOOOOOOOOOOOOOOO!!!!!!!!!!!!!!

Julia Ardón dijo...

ya ves? un poemita de casi adolescente.